miércoles, 10 de febrero de 2010

Galeno

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 11:27, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila




A Dios le pido hermano mío
en éstos versos que te dedico
que no te vaya a echar al olvido
y que haga de ti un famoso médico.

Que se cumplan tus grandes aspiraciones,
que no quede ninguna sin que se cumpla,
te convierta en un maestro de curaciones
y no te desampare nunca, nunca.

Y cuando seas grande y famoso
y ostentes con orgullo el título
de médico cirujano, magno coloso,
de la ciencia haced un capitulo.

Cuando ya famoso y sin pelo
esté quedando tu cabeza pensante
cuando seas artista del escalpelo
y te atrevas hacer un trasplante.

Quizás llegue achacoso a tus manos
todo moribundo, con la vista ida,
a implorarte como todo humano
¡Doctor, por favor, sálveme la vida!

y tu, lleno de parsimonia todo,
esculques mi cuerpo febril y lacerado
y al tomar mi pulso débil y flojo
–digas– ¡Murió o mi reloj se ha parado!

San Miguel de las Palmas de Tamalameque Colombia

sábado, 6 de febrero de 2010

Cotidianidad

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 11:12, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila



Hoy es lunes, aburrido estoy en casa
Estresado y triste, sumido en un sopor,
Sintiendo impávido el tiempo que pasa
Y la mella que hace en mí la situación.

Me asomo a la calle, veo la gente pasar
Con el seño adusto y su paso muy ligero,
Maldiciendo por adentros tener que trabajar
y la desgracia infinita de no tener dinero

Entre los que pasan abundan los loteros,
Vendedores de rifa, fantasías y nirvanas,
Estudiantes ruidosos, verduleras y lecheros

El que vende pócimas, el que todo mal te sana,
El que ofrece pastas para el sexo y tinte para pelo,
¡Tal es el acoso, que de comprar entran las ganas!

San Miguel de las Palmas de Tamalameque Colombia

miércoles, 3 de febrero de 2010

Voluptuosidad

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 7:40, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila



Armoniosas curvas sinuosidades
de su hermosa y delicada figura,
se marcan bajo el ceñido traje
de ésta provocativa criatura

De andar grácil, bella entre las beldades.
¿Quién pudiera acariciar las estructuras
cimbreantes que cubre los encajes
de su traje –fachada de su arquitectura-?

Cómo deseo alzarme por las escaleras
torneadas de sus sensuales muslos,
y llegar a su pubis a la carrera...

Llegar a sus senos, su boca de breva,
asomarme a sus ojos, ver otros mundos,
bajar a su pubis ¡Qué ventolera!

San Miguel de las Palmas de Tamalameque

lunes, 1 de febrero de 2010

Última voluntad

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 16:09, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila



Cuando ya llegue mi fatal
Tenebrosa y fría hora postrera
Dejadme tranquilo sin altar
Ni discursos... ¡por mi abuela!

Ni regio mármol ni mausoleo
Que aquí acaba mi carnaval humano
Y como todo mi esqueleto será feo,
Cuando pútrido lo habiten los gusanos.

Ni responsos, ni cantos gregorianos,
Ni pompa fúnebre, ni luctuosos ornatos,
Sólo quiero que canten mis paisanos
Bellas tamboras para alegrar el rato.

En mi casa que no llore nadie
Que se tome mi muerte en broma
En vez de rezos, que se baile y baile
¡Eso sí... guachernas y tamboras!

Otra cosa, dejen tranquilo mi nombre
Sin biografías, ni honores póstumos,
Quiero tan solo de la muerte la cumbre
Y de la tierra un hoyo bien hondo.

Apiádense de mí, queridos coterráneos
No me expongan en cámara ardiente
Déjenme tan solo –en mi edificio subterráneo–
Unos cigarrillos y un poco de aguardiente.

Para hacer menos tediosa la espera
Y más agradable mi viaje final
Y ebrio a San Pedro decir: ¡Que jartera!
Y a los muertos decirles: ¡Hola que tal!.

San Miguel de las Palmas de Tamalameque

jueves, 28 de enero de 2010

Apareincia

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 9:21, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila




Para qué quejas,... para qué lagrimas,
Que han de dar mis ojos ¡qué carajada!
¿Para qué?...¿para qué? –si nada me anima–
¡Si he de llorar por ti, lo haré a carcajadas!

Me duele el alma –no niego– ¿para qué?
Me duele el corazón –qué importa que duela–
Tú al traicionarme, mataste mi fe,
¡Y estoy como si me doliera una muela!

Llorar no haré –aunque el dolor no resista–
Aunque en verdad, me hallo mal herido,
Pero no!... llorar a moco tendido

¡No señor...! nunca pago a ese precio,
Primero pruebo los analgésicos
Y si no alivian ¡voy donde el dentista!.

domingo, 24 de enero de 2010

Peluquero de mi pueblo

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 6:57, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Avila



En mi pueblo vive excelente peluquero
En verdad un estilista, locuaz y singular
Que de todos conoce los mínimos secretos,
Incluyendo sin tapujos la vida conyugal.

El hombre habla del cura, alcalde y personero
De los que conoce sus vidas y consciencias,
También cuenta pormenores del concejo,
Y la nueva fortuna del secretario de hacienda.

Cuando te motila, te cuenta con gracejo
Las cosas que le pasan a casadas y solteras,
Mientras se sonríe mirándote al espejo.

Ya que entre polvos, lociones y barberas
Este peluquero a todos toma el pelo
Mientras la lengua afila y repica su tijera.

San Miguel de las Palmas de Tamalameque Colombia

viernes, 22 de enero de 2010

El águila financiera

Posted by Diógenes Armando Pino Ávila 6:32, under | No comments

Por: Diógenes Armando Pino Aila



Tengo un gran amigo llamado José Luis
Que vive feliz y contento en nuestro pueblo
Del que a diario todos cuentan historias mil
De él se tiene ya, un extenso anecdotario.

Es un hombre casero que ahora necesita
Ver el noticiero acomodado frente a su televisor
A su esposa e hijos va comentando la noticia
Con esa soltura de amigo y gran conversador.

De la sección bursátil les explica el pormenor
Y con aparente experticia saca cuentas y anota
Los cambios que han dado el petróleo y el carbón,

De Wall Street asevera: el Dow Jones repunta y flota.
Pero un recuerdo le calla, le invade un gran temor,
Es que mañana le llega, el cobrador del “Gota a gotas”.

San Miguel de las Palmas de Tamalameque_Colombia